domingo, marzo 13, 2005

Noche Paulista

Son las 2 de la manhana. En 5 horas nos vamos a la costa Paulista en un coche de alquiler. Los dos conductores ya estan en la cama desde hace tiempo. A mi me tienen secuestrado jugando al poker, si pierdes bebes. Yo ya estoy poniendome malo. Estoy jugando contra un japones, una americana y un malayo, los dos ultimos son unos craks. Si en una hora no sabes quien es el pardillo es que el pardillo eres tu. Con la excusa de escribir consigo salir del juego.
Esta tarde fuimos de compras a por unas chanclas muy famosas que se llaman Havaianas. La gente se compro banhadores y camisetas, yo una crema solar. Lo mejor es haberse dado una vuelta por el centro, que siempre esta animado. Me imagino viviendo aqui con 40 anhos. Vivir en un lugar donde nadie te conoce, no tienes reputacion que cuidar y por lo tanto tus actos no tienen consecuencias. Es decir, que puedes hacer cualquier cosa. Esa es la sensacion que me dan algunas personas que veo por la calle, parecen europeos, tienen el pelo negro y la cara de ese color marron-amarillo propio de los portugueses. Parece como si estuvieran escondidos de su madre, que vive en Lisboa. Gente sin moral, pero con buena educacion, gente de vuelta de todo. Todos si excepcion llevan pantalones largos.
En el sofa, un japones, que no tenia blog, y se ha plimplao media botella de whiskey, duerme en plan Gargamel..., gentileza del malayo.